Warner Bros. anunció el despido del actor Charlie Sheen como protagonista de la comedia “Two and a Half Men” por encontrarse “enfermo” y por sus insultos a ejecutivos que demuestran su “depravación moral”.
“Tras considerarlo cuidadosamente, Warner Bros. Television ha rescindido los servicios de Charlie Sheen de manera inmediata”, según el comunicado de la productora en el que se argumentó que el intérprete se comportaba de forma “autodestructiva y parecía estar muy enfermo”, lo que había obligado a suspender el programa.
Sheen, el actor mejor pagado de la televisión de EE.UU., se encuentra en primer plano mediático debidos a sus problemas con el alcohol y las drogas que lo llevaron a un centro de desintoxicación y provocaron la cancelación de “Two and a Half Men”. Para Warner, Sheen cometió además “un delito grave” por ofensas “inmorales”, entre otros contra el cocreador de la serie, Chuck Lorre, al que llamó “charlatán que eligió no hacer su trabajo”, “un pedazo de mierda” y “un estúpido hombrecito”.
El actor aseguró que recibió la notificación de su despido mediante “un mensaje de texto o algo” y no dudó en calificar de “cucarachas amarillas” a los ejecutivos de Warner.
“Ni siquiera tuvieron la decencia de llamarme. ¿Puse 5.000 millones de dólares en sus bolsillos y éste es el respeto que obtengo? Es deplorable y deberían avergonzarse”, afirmó Sheen, cuyo abogado, Marty Singer, ya avisó que llevarán el caso a los tribunales. “Es una cuestión de tiempo, podría ser esta semana (o) un poco más tarde. No tenemos prisa pero les demandaremos”, dijo Singer.
Tal y como ocurriera cuando se anunció la cancelación de “Two and a Half Men”, el estudio no especificó que la salida de Sheen fuera a suponer el final definitivo de la serie, con lo que dejó la puerta abierta a continuar la producción con un sustituto. Sheen, protagonista en los medios estadounidenses en las últimas semanas con sus polémicas declaraciones, lanzó este fin de semana a través de internet su propio programa, “Sheen's Korner”, que recibió en apenas dos días más de 1,2 millones de visitas.
La webcast de Sheen, un espacio improvisado que sirve de tribuna pública al controvertido intérprete, arrancó el sábado con una emisión que fue seguida en directo por 100.000 internautas y tuvo su segunda parte el domingo.
La semana pasada, Sheen, de 45 años, abrió una cuenta en la red social Twitter y logró el récord Guinness por alcanzar el millón de seguidores en esa plataforma más rápido que ningún otro usuario, en 25 horas y 17 minutos. La red social es ahora la portavoz del actor después de que su responsable de relaciones públicas dimitiera tras declararse incapaz de contener la destructiva verborrea de su cliente, imparable desde que pasó por una clínica de desintoxicación en febrero.